Como medida preventiva la Unión de Nueva Zelanda pidió a jugadores y dirigentes firmar un convenio anticorrupción.
La unión neozelandesa de rugby impulsó la firma de una carta contra la corrupción, "Nuestro deporte tiene una buena reputación, pero no hay que dar todo por sentado. Hemos visto ejemplos en el extranjero de lo que puede causar la corrupción en el deporte y no queremos que eso suceda en el rugby”, afirmó Neil Sorensen presidente de la entidad.
Entre los puntos que estipula la carta firmada por unos 2 mil jugadores y dirigentes esta la prohibición de apostar en todas sus formas, incluso a través de una tercera persona. Además, se comprometen a no distorsionar o intentar distorsionar el resultado de un juego. En caso de que infrinjan algunas de estas medidas la unión podría decretar la suspensión de por vida.